1.- ¿ Qué es para usted la literatura?.
Una forma de gozo. Merced a ella he podido soñar y vagabundear por los espacios de la imaginación.
2.- Opinión sobre la literatura chilena actual?.
Estamos muy cerca para enjuiciarla. Se necesita distancia para enfocar a los contemporáneos. Veo a una generación joven que ha publicado mucho, pero queda en el aire la sensación que el talento no corre a parejas con la abundancia. Pertenezco a otra generación, a una que ha llenado el panorama chileno con grandes, con verdaderos colosos en las letras y que hoy ya están convertidos en clásicos. Son los que siempre surgen en las historias. Esto no debe agradarles mucho a los jóvenes, pero la historia es así. Los de hoy serán clásicos mañana, si es que poseen el talento y las condiciones para serlo. Hasta la fecha, lo dudo. Pero es un juicio subjetivo, por lo tanto me puedo equivocar.
3.- ¿Cómo se relaciona con los escritores de su generación?.
La verdad es que prefiero leerlos antes que conocerlos. La cercanía permite ver las miserias humanas. La lejanía los mantiene incólumes y hasta se puede admirar.
4.- ¿Cuáles son el poeta y el narrador vivo más importante en Chile?.
Mi devoción por Nicanor Parra es ineludible, tal como lo fue por Jorge Teillier. En narrativa el espectro es más amplio: Ampuero, Skarmeta, Isabel Allende, Hernan Rivera Letelier. En todo caso, es más difícil de enjuiciar porque tienen atrás, en los ya fenecidos, como decíamos verdaderos colosos, grandes, imponentes (Rojas, Donoso), González Vera, Lillo, Durand, Edwards Bello,etc).
En la narrativa actual, paso.
5.- Que opina de institucionalidad cultural.
Simplemente no existe. Y si existe, son bocetos, eternos planes, farándula. Falta mucho para que Chile crea realmente en la cultura y se haga algo concreto por ella. Lamentablemente, hay mucha resistencia por el sistema económico imperante: la cultura no vende. Por consiguiente, solo nos queda aguardar que la cuestión detone algún día y Chile realmente tenga cimientos poderosos en materias culturales.
Hasta hoy, no se ve mucho, casi nada.
6.- ¿Tienes planes de publicar próximamente?.
Cuando me logre el Loto o el Kino sin duda alguna. Por ahí aguarda la resurrección tres novelas, tres ensayos, dos antologías, un volumen de cuentos, otro de poesía, etc. Ojalá despierten algún día. La humanidad no sabe lo que pierde.
7.- ¿Cuáles son sus tres virtudes y tres defectos más sobresalientes?.
Difícil respuesta. Nos pone frente a un espejo y nos obliga a definirnos. Definir, encasilla, limitar ¡horribles palabras!. Defectos: soñador empedernido, falta de entusiasmo por vivir (sobrevivo), cierta negligencia por caminar más y mejor. ¿Virtudes?. Aquí también paso. La soberbia y el ego nos miran sonrientes detrás de la puerta..
8.- ¿Existe la crítica literaria?.
En Chile se acabó con la muerte de Raúl Silva Castro, Hernán del Solar, Ricardo Latcham y, por supuesto, el mejor, Alone. También hubo un sacerdote, Ignacio Valente, que mantuvo la duración. Después, no veo nada. Y si la hubiera, son enfermas de aburrimiento.
JORGE ARTURO FLORES nació en Constitución (1946). Novelista, cuentista, poeta y ensayista. Colaboró en el semanario El Deber de la ex-Nueva Bilbao de Gardoqui y desde 1989 es columnista semanal y cronista literario del periódico El Litoral de la misma ciudad. Pertenece al Grupo de Arte José Caracci de Constitución y al Centro Hijos de Constitución. Ha participado en diversos encuentros regionales de escritores y en recitales de poesía. Jurado del Concurso Regional de Cuentos Carlos René Correa de Curicó. Formó parte del Taller de Cuentos de Lilian Elphick (Sech) y es miembro de la Sociedad de Escritores de Chile. Tiene una considerable obra inédita en poesia, ensayo, cuento y novela.