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Opinión

¿Es la SECH otro partido político de izquierda?

El buzón de correos se me ha llenado de misivas contra la Sech por la visita de un ex uniformado a su casa de Santiago.

A riesgo de que se me trate de derechista, o de cualquier otra cosa, tengo que decir que me sorprende el odio que esto ha engendrado, pero por sobre todo me choca la politización de la SECH, donde casi todos los directores son comunistas, según una de las misivas recibidas.

¿Qué es entonces la SECH, una organización gremial de escritores o un partido político?

Más parece una bolsa de gatos donde algunos odiosos y resentidos disparan a diestra y siniestra y que hacen de un vaso de agua una tormenta.

No es fácil para un escritor(a) chileno(a) querer adherir a una organización como aquella, ¿para qué? Sobre todo si el interés de éste es escribir y no agarrarse de las mechas engendrando odio tras odio.

¿Porque, qué pasa si uno no es comunista o socialista?

Recuerdo cuando solicitamos el apoyo de la Sech para defender una plagio del cual habíamos sido víctimas en el Consejo del Libro y la Lectura y los directores se hicieron los lesos porque no les convenía defendernos, a pesar de la evidencia presentada. Y eso no es todo, supongo que habrá tenido también algo que ver el cartel de “derechista” que algunos me han colgado por haber estudiado en la Escuela Militar.
Varios me lo han sacado en cara a pesar que yo sólo estuve en ella dos años, tenía 16 y 17 años y nada tuve que ver con la dictadura, al contrario, fui su víctima, como muchos otros chilenos.

-Tú estudiaste en la Escuela Militar y a mi me torturaron en ella, me dijeron.

Que un ex militar, quien ahora es el Alcalde de la comuna donde la Sech tiene su casa los visite, no me parece un crimen, sino más bien un signo de tolerancia, de buenos modales, de formalismo a la que está obligada una institución como aquella que se supone seria.
No es para que algunos pongan el grito en el cielo diciendo que este acto atenta contra la dignidad de la institución y quieran desatar una verdadera guerra.
¿Hasta cuándo? La Casa del escritor se supone de todos los escritores o ¿es solamente de aquellos más virulentos y de izquierda?

Porque ¿Tiene la gente de “izquierda” el monopolio de la cultura en Chile? Parece que sí. Ellos han hecho de esto una cuestión de etiquetas, resentimiento y odio ciego. Y hasta se pelean entre ellos.

De este modo poco o nada se construye.

Personalmente prefiero la Sech cuando organiza eventos literarios o se preocupa de la pensión de los escritores. Eso es lo que hay que destacar, no el resentimiento obsesivo que al final no sirve para nada.

 

Ernesto Langer Moreno
editor: www.escritores.cl
Agosto 2009

 

COMENTARIOS

Estimados amigos: La literatura vive en el reino de la libertad y no sabe de banderas políticas o deja de ser literatura y se convierte en pasquines. La literatura acoge a todos y vive en el territorio de la imaginación. Sigamos soñando. Con aprecio,

Vicente Vásquez. Guatemala.


Ernesto, te apoyo absolutamente en tu opinión.
Siempre he pensado lo mismo ¿Cambian las artes según el color politico?  ¿Cambian los valores morales segun el color?               
Si queremos un Chile mejor hay que partir por casa, pero la casa de nuestro yo interior, mejorarnos desde dentro para emitir  gestos conciliatorios,  los   odios solo conducen al enfrentamiento.
               
Demos voz de alarma a la degradación de nuestras juventudes por la falta de preocupación de  nuestra sociedad para ofrecer verdadera reabilitación a aquellos marginados socialmente.
               
Tenemos cientos de gritos del silencio....ahí debe estar nuestra mejor arma  <<La pluma.                 

SALUDOS
Hector Perez


Te felicito por tus palabras Ernesto, el comportamiento de algunos socios es una vergüenza.
Varias veces, cuando las conversaciones; en la Casa del Escritor, derivan en política, les aclaro: he ido a hablar de literatura pues si quisiera hacer politiquería ingrasaria a un partido político y... si mis intenciones, que Dios me pille confesado, fueran hablar de religión iría a un templo o a una iglesia.
Vasta con la cantinela de izquierdas y derechas, estaría bueno que maduraran.


Saludos fraternales,
Nelson Gómez León.


Bueno, si interesa mi humilde opinión. estoy en la sech desde los quince años. jamás nadie me pregunto si soy de algún partido. no escuche que hablen de política, y si lo hicieron fueron piolitas.

nuestra casa de la sech, es de todos, y el que diga que no, se puede ir a la mierda. es nuestra. y todos tenemos derechos a visitarla y a opinar. debemos respetar las ideas políticas y religiosas.

no pertenezco a ningún partido, pero si reconozco que hay que ser de alguno para que te den esférica. he notado ciertas indiferencias desde hace un largo tiempo. pero como ellos, en especial los del directorio no me mantienen ni me ayudan cuando estoy muy mal, no me interesa. siempre he dicho, que la justicia tarda,pero llega. nunca he sido trepadora, no le he  chupado las medias a nadie. soy lo que soy, gracias a mi esfuerzo,algún día la justicia llegara y todo quedara en paz. no es mi ánimo de ofender a nadie.

agradezco al lacamara que siempre me apoyo cuando solía hacer eventos. y debo decir que desde que hay nuevas personas en la sech, la cizaña anda rondando nuestro castillo.

a la persona que condenan, y que piensan condecorar, nunca hasta ahora se le ha comprobado que halla sido de una antigua  llamada cni. no juzgo sin tener la verdad frente de mi. vivir y dejar vivir.

Alejandra Zahri


Me ha parecido muy ponderado tu texto y te apoyo totalmente.

Loreto Silva.



Solidarizo plenamente con don Ernesto L. y sí, me parece que desde hace un tiempo ellos se creen \"dueños del arte \"en general. \"Porque ¿Tiene la gente de “izquierda” el monopolio de la cultura en Chile? Parece que sí. Ellos han hecho de esto una cuestión de etiquetas, resentimiento y odio ciego. Y hasta se pelean entre ellos.\"

harlenne


Ernesto.
Sobre tu comentario, bueno se puede decir mucho al respecto; como no tengo antecedentes directos de la situación, es aventurado decir ello estuvo bien o estuvo mal. Pero viendo esto con una perspectiva general, me surgen varios análisis: la Casa de los Escritores debe estar abierta a todos; una condición de ex uniformado no puede hacer que nadie ipso facto pase a lista negra, pero un sentido común también me dice que si alguien violó DD.HH. o estuvo involucrado en algo semejante no es bienvenido ahí ni en otros lugares, o el autor de cualquier falta (ex uniformado o no) socialmente condenable; la SECH o cualquier institución no pueden ser en sus acciones, de izquierda, de derechas, de centros, de esto o aquello, puesto que en la sociedad (exceptuando los extremismos azules o rojos) el arte es de todos y para todos y el artista es quien más que nadie debe ser un ejemplo de tolerancia; en cierta forma me incomoda cuando se busca asociar a los artistas y creadores (en gran parte por sectores de ellos mismos) con tendencias políticas determinadas, no es nada malo tener ideas y defenderlas, al contrario, pero no pretender que solamente son verdaderos artistas los de un color determinado (más claro por mi parte, en la música disfruto y medito acerca de la "Cantata Santa María", de Quilapayún, tanto como siento agrado al escuchar a los "Huasos Quincheros" interpretar canciones tradicionales del campo chileno un tanto más desde la visión del huaso-patrón; ambas visiones musicales son parte del acerbo cultural chileno). Otro aspecto lamentable, es la etiquetación a que estamos tan acostumbrados en Chile desde hace unas décadas: si uno opina muy radicalmente sobre ciertos temas de injusticia social, lo tildan de rojo; si uno tiene una visión más conservadora de ciertos valores y principios, lo califican de burgués o de "derechista"; si uno aplica un "Dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios", con opiniones más salomónicas, bueno termina calificado de que "no es chicha ni limonada" y lo ignoran o tiran para abajo todos los grupos interesados. El gran problema con las etiquetas, es que cuando a alguien se la ponen, nunca más se librará de ella aunque no exista ninguna relación verdadera. No queda otra cosa que "al mal tiempo buena cara".


Estimado Ernesto:
 
                        Agradezco el fondo del artículo que me envías.
                        Precisamente nuestra tarea, como Directorio, ha sido ir poco a poco (y no sin incomprensiones de variada indole e intención) profundizando en la Sech como un espacio de encuentro, debate informado y respetuoso, pero sobre todo de pluralismo real y fratreno. Lo anterior no significa renunciar a nuestros principios o legitimas formas de ver la vida y la sociedad, sino todo lo contrario, se trata de ir creciendo en humanidad y respeto para que los dolores y atrocidades del pasado nunca más vuelvan a campear en nuestra patria ni en ningún lugar del mundo.
                         Sabemos bien que esta opción tiene un costo, incrementado por las intolerancia, pero estamos dispuestos a pagarlo por coherencia existencial y por que como creadores nuestra obra debe siempre apostar por la vida y la belleza.
 
                          Saludos
 
                                     Reynaldo
 
PS: Te adjunto Declaración Sech al respecto

Declaración Pública de la Sociedad de Escritores de Chile

Ante la distorsión y malversación informativacirculante en diversos medios que no recurrieron a la fuente de origen, en relación a una supuesta distinción otorgada al señor Alcalde de Providencia don Christián Labbé Galilea, en su visita a la Casa del Escritor, la Sociedad de Escritores de Chile cree necesario puntualizar ante la opinión pública lo siguiente:

1.- La Sociedad de Escritores de Chile no ha otorgado ningúnpremio, distinción o galardón al señor Alcalde Labbé. La distinción fue entregada por la Academia Chilena de Literatura Infantil y Juvenil, institución independiente de la Sech y la ceremonia se realizó en el Café Literario del Parque Bustamante.

2.- La Sociedad de Escritores de Chile, desde su instalación en la comuna de Providencia, como anteriormente en la comuna de Santiago, ha mantenido respetuosas y cordiales relaciones de trabajo y cooperación con todos los Alcaldes que se han sucedido. Todos los presidentes y muchos directores de la Sech han sostenido entrevistas y encuentros en diversos espacios con distintos alcaldes de la comuna de Providencia, especialmente si los mismos han sido elegidos democráticamente. Hemos desarrollado un sostenido trabajo de extensión literaria, a través de talleres, orientado a jóvenes, adultos y tercera edad de la comuna, que han involucrado a miles de personas, tal es la extensión e impacto social de nuestro trabajo.

4.- Los recursos económicos para la compra de la Casa del Escritor en 1961, fueron gestionados por los escritores Esther Matte Alessandri y José Miguel Vicuña ante el gobierno de la época. Posteriormente, Pablo Neruda y otros socios colaboraron en la compra e implementación de la misma.

5.- La Casa del Escritor, debido al paso de los años, requiere de reparaciones impostergables. El proyecto para lograr este objetivo se encuentra en marcha, la casa próximamente será declarada Monumento Nacional, afortunadamente hemos conseguido un fuerte apoyo, entre otras entidades de la I. Municipalidad de Providencia, gesto que agradecemos en lo que vale.

6.- No hace falta entrar a detallar lo que ha sido nuestro compromiso histórico con la causa de lo DD. HH, no sólo en Chile sino en todo el mundo. A pesar de nuestra escasez de recursos nuestros talleres y salas siempre han sido gratuitos para las victimas de las violaciones a los DD.HH. La Casa del Escritor ha sido, es y continuará siendo un espacio abierto al intercambio de ideas con alturas de miras, respeto y profundidad de análisis y propuesta.

7.- La Sociedad de Escritores de Chile desea mediante esta declaración dar por cerrado este tema esperando que los espacios ganados entre todos para la expresión, libre, informada y responsable no se vean constreñidos por tergiversaciones que poco, o nada, aportan a la construcción de un Chile más justo y fraterno sin ningún tipo de exclusión política o social.

Directorio
Sociedad de Escritores de Chile

Santiago, 19 de agosto de 2009

 


 

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